A estas alturas, seguro ya te has adentrado en el estilo de vida que generan las artes marciales, por lo que probablemente ya eres más consciente de trabajar tanto el cuerpo como la mente durante los entrenamientos, y sabes que ambos deben estar muy bien conectados para un buen desempeño dentro y fuera del dojang. No por nada los antiguos maestros de artes marciales: formulaban “el cuerpo, la mente y el alma son uno” así como los griegos sostenían el “mente sana, en cuerpo sano”. Seguramente, también ya has hecho varios ajustes en tu día a día, no solo nos referimos a la rutina que realizas al salir corriendo de la oficina para llegar a tiempo a clase, sino a los que incorporaste para tener más energía durante el entrenamiento y mantenerte en forma para aumentar tu agilidad en clase. ¿Te suenan dieta, sueño y ejercicios extras? Sí, sabemos que has estado llevándote tarea diaria a casa.

Desde niños estamos acostumbrados tanto a investigar conceptos como realizar ensayos diarios, pues así aprendimos en la escuela. Por ello, no es de sorprenderse que nos sea natural buscar aplicar este mismo esquema de aprendizaje también al Taekwondo. Pero qué complicado es investigar sobre este tema, definitivamente la escuela era más sencilla, pues ya existía una estructura, un programa y hasta un maestro. Los cuales facilitaban mucho el trabajo, ya que te iban guiando en cada aspecto importante, empezando por informarte qué se iba a evaluar, cómo debías prepararte, en qué debías enfocarte, cuáles libros eran necesarios, cuándo tiempo debías dedicarle y hasta dónde llegaba este curso. Todo esto venía en bloques seriados que iban desde el primer año hasta recibirte de la licenciatura o ingeniería de tu elección. Pero y ¿cómo encuentras algo así?

Lo cierto es que contar con un maestro, guía, entrenador personal o el consejo de alguien que esté recorriendo el mismo camino suele ser un tanto complicado, pero tengamos un poco más de perspectiva, ¿preguntando se llega a Roma, o no? Es así como de pequeños “bocados” has ido recopilando información y aprendiendo a aplicarla. Si has sido afortunado, pudiste consultar directamente en persona al experto en su tema, llamese doctor, nutriólogo o entrenador; si no fue así, pudiste haberlo hecho de forma indirecta, mediante alguna revista, sitio web o algún otro canal que nos provee la tecnología, es más, seguramente ya has leído alguno que otro libro y posiblemente te encuentras no solo aplicándolo en tu día a día, sino compartiéndolo con los que te rodean.

Así como tú, nosotros también hemos estado en esa situación y de hecho seguimos recorriendo este camino: investigando y aplicando. Como sabemos lo complicado que puede ser a veces encontrar respuestas, quisiéramos ser una fuente más de apoyo ¿pero cómo? Mediante el mismo canal, queremos ayudarte compartiendo lo que hemos ido recolectando y que nos ha funcionado para balancear la oficina con nuestros entrenamientos en el gimnasio, doyang y dojo. Puedes estar seguro que podrás consultar desde las rutinas de entrenamiento, el “cómo y cada cuando”; pasando por el “qué comimos”; “en qué nos basamos”, así como en “qué o quiénes nos inspiramos”.

Quiénes somos

Jesica Goya
Cinta Negra II Dan
Taekwondo Moo Duk Kwan

Desde pequeña recuerdo siempre estar activa haciendo algún tipo de deporte, ya sea natación, baloncesto o fútbol, por un tiempo se cruzó por mi camino la raqueta de squash y el atletismo, este último me llevó a conocer el gimnasio y los beneficios de entrenarlo adecuadamente. Después, mientras cursaba mi Ingeniería, logré tomar unos cursos de montañismo, espeleología, entrenar algo de natación y continuar con el gym. En el 2014 comencé mi maestría en Canadá, y dado que la mitad del año hace frío y hay nieve, había que encontrar una actividad intramuros que realizar, fue así como llegué al Taekwondo. Durante dos años me ayudó a mantenerme en forma, a desestresarme y me enseñó defensa personal. De regreso en México, busqué continuar con este arte marcial, y mis pasos se dirigieron a Moo Duk Kwan Central, donde entreno desde marzo del 2016.

Es gracias a los múltiples deportes que practiqué durante mi infancia y juventud, que logré adquirir una gama importante de coordinación, fuerza y destreza, habilidades que han sido cruciales para poder avanzar en mi entrenamiento de TKD y de cierta manera “compensar” que no llevo tantos años practicándolo o que no me inicié en su práctica desde pequeña.

Yuriana  Pazarán
Cinta Negra IV Dan
Taekwondo Moo Duk Kwan

Vengo de una familia de médicos acostumbrados a la lectura, el estudio, las pláticas trascendentales, al deporte y a una gran dosis de disciplina. Aunque por las tardes asistía a los entrenamientos del equipo de futbol y voleyball, jamás me perdía cuanta película de Jean Claude Van Damme, Bruce Lee o Chuck Norris transmitían en la tele, me parecían verdaderamente increíbles.  Apenas con ocho años mi padre – exfutbolita, boxeador y karateca- me llevó a mi clase de prueba de taekwondo, yo estaba fascinada, era como un sueño, parecía exactamente como en las películas ¡todos con sus cintas de colores y sus uniformes blancos! Esto es lo que quiero hacer, le dije muy segura a mi papá al regresar de clase. En ese entonces, el taekwondo no era un deporte olímpico, y por tanto era desconocido sobre todo en provincia, de hecho la gente se refería a él como karate coreano. Mi profesor era tercer dan con una técnica muy bien trabajada, escuchaba el dobok sonar con cada patada y cada defensa, sus clases eran de excelente calidad pero también muy duras, en los siete años que entrené en su dojang solo nos graduamos tres de cintas negras, todos con mención honorífica y también como ligas humanas (sí, ¡ouch!).

Salvo los cuatro años que tuve que suspender mi entrenamiento mientras estaba en la facultad, pues las becas exigen un buen promedio, no he parado de practicar desde que terminé la licenciatura. Mi receso más grande ha sido de tres meses, justo por una cirugía de rodilla debido a un accidente en combate. Aunque desafortunado en un inicio, este incidente además de encaminarme a incluir el gimnasio en mi rutina diaria, me volvió más consciente tanto de la combinación adecuada de ejercicios de calentamiento, elasticidad, fuerza y rapidez, así como de la importancia de su correcta ejecución. Me encanta compartir lo que he ido aprendiendo en todo este camino, me llena de satisfacción ser parte del progreso de mis compañeros y no solo del mio.

Erick Aguila Martínez 
Cinta Negra Lima Lama 
Cinta Roja 1° kup Taekwondo

En junio de 2009 comienza la trayectoria de artes marciales en mi vida, gracias a la insistencia de mi hermano por acompañarlo a entrenar, con apenas 14 años decidí unirme al grupo junto con él y sus compañeros, hablando con el profesor J. Félix Martínez Salgado. En aquel entonces inicié practicando el arte marcial polinesio Lima Lama, podría decir que era un mundo completamente desconocido para mi, entrenamientos muy fuertes y duros en compañía de personas que se convirtieron en mi segunda familia, eso y muchas cosas más fueron las que me motivaron  a querer seguir entrenando y avanzar en las artes marciales. Durante los siguientes 3 años me dedique a participar en torneos estatales y nacionales, asistiendo a seminarios y exhibiciones, realizando mis exámenes de cambio de grado correspondientes teniendo excelentes resultados al menos para satisfacción personal. En 2012 en mi ingreso a la universidad participé en las visorias de talleres y me integré al grupo selectivo de Taekwondo de la Universidad Tecnológica Emiliano Zapata del Estado de Morelos y comenzó una nueva trayectoria en un arte marcial diferente para mí.

Fue durante la preparación para mi examen de cinturón negro en Lima lama cuando me involucré dando clases de acondicionamiento físico y preparación de alumnos principiantes para sus exámenes correspondientes. En diciembre del 2013 logré obtener el grado de cinta negra después de una preparación exhaustiva, teniendo como resultado llevar un “cargo” dentro de la escuela en la que me preparé y ya formando parte del grupo de profesores. De forma paralela a Lima Lama llevé acabo mis entrenamientos preparativos para las competencias nacionales de Taekwondo durante 4 años consecutivos en los cuales a pesar de ser un competidor más fungí como coach de mis compañeros y ayudante del profesor a cargo del selectivo. Hasta enero de 2016 conseguí acreditarme como cinta roja en Taekwondo para así cerrar un ciclo dentro de la selección y concluir mis estudios universitarios.

A mediados de 2016 debido al trabajo me mudé a la CDMX y en noviembre de 2017 decido regresar a entrenar en la escuela  MooDukKwan Central teniendo como objetivo conseguir la satisfacción de lograr un cinturón negro en Taekwondo, logrando avanzar hasta la fecha actual un cinturón verde avanzado. De igual manera y hasta la fecha continúo dando clase de taller a un grupo de alumnos de bachillerato en Morelos CBTis136 y  clases normales a los miembros del club que me vio nacer como artista marcial.

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